“Oh, ¿eres un sugar daddy? Pues seguro que para ti las citas con azúcar deben ser pan comido”.
Claro, si tienes el dinero bien pesado, eso debería bastar para ser un sugar daddy, ¿no?
¡Pues no tanto! Ser sugar daddy no es solo cuestión de soltar la lana. Al igual que en cualquier relación, las citas con azúcar necesitan dirección y, a veces, podemos meter la pata.
Aquí te dejamos algunos errores que podrías estar cometiendo sin darte cuenta y cómo evitar que te salgan caras:
Errores que podrías estar cometiendo y cómo evitarlos
1. Dar por sentado a tu sugar baby
Los sugar babies no solo buscan que les des el dinero para todo. Muchos también esperan que les des consejos útiles y algo de orientación en la vida. A cambio, te ofrecen su compañía y cariño.
No esperes que tu sugar baby te aguante si no cumples con tu parte del trato. Debes invitarla a salir, comprarle regalitos y, en general, comportarte como un buen novio. Si te piden consejo sobre sus metas, deberías estar dispuesto a echarles la mano.
Solución: Si sigues dándole por hecho y no cumples con lo prometido, corres el riesgo de perder a tu sugar baby, sin importar cuánta lana tengas.
2. Aprovecharte de tu sugar baby
Tu sugar baby no es tu sirvienta, ni tu secretaria, ni tu niñera. No deberías esperar que haga nada más allá de ser tu compañía o pareja, a menos que esto se haya hablado y acordado antes.
Algunos sugar daddys tienen más de un sugar baby y suelen reemplazar a los “viejos modelos” por el “último grito de la moda”.
Solución: El respeto mutuo debe ser la base de toda relación de azúcar. ¡Tratar a tu sugar baby como un trapo de piso o un saco de boxeo emocional no es nada respetuoso!
3. Esperar que tu sugar baby se ajuste a tus expectativas
Esperar que tu sugar baby encaje en tu ideal de pareja, esposa o amante es un gran error. Si exiges que se vista, hable o actúe de cierta manera, estás diciendo que no te importa quién es ella realmente.
Eso puede ser muy degradante y, honestamente, nadie aguantaría mucho tiempo así.
Solución: Si algo no te gusta del carácter de tu sugar baby, habla con ella de manera justa y calmada, o tal vez… termina la relación y busca a alguien que se ajuste mejor a tus expectativas. Pero no la pongas en la situación de tener que cumplir con tus demandas.
4. Pretender ser algo que no eres
No te hagas pasar por lo que no eres. No intentes aparentar ser un magnate del petróleo si apenas puedes pagar la renta. Y si prefieres una noche tranquila en casa en lugar de irte de fiesta, no trates de parecer un adicto a la adrenalina.
Un sugar daddy podría intentar usar estas tácticas para parecer más rico o más joven, pero probablemente solo resulte contraproducente cuando la verdad salga a la luz.
Solución: Sé tú mismo y siéntete a gusto con ello. Si una sugar baby no acepta eso, probablemente no sea la indicada para ti.
5. Tener una imagen poco realista de la relación
Una relación de azúcar se basa en que tú satisfagas las necesidades de tu sugar baby, ya sea en lo financiero, con asesoría o con tu experiencia de vida. A cambio, obtendrás su compañía.
Pero no puedes esperar que ella se involucre emocionalmente contigo como lo haría una pareja real.
Solución: Si el sentimiento es mutuo y ella se enamora de ti, genial. Pero esperar que ella se enamore es una receta para la decepción.
6. Dejar que tus emociones te nublen el juicio
Nunca permitas que tus emociones interfieran con tu sentido común. Recuerda que la relación se basa en un acuerdo entre dos personas adultas.
Solución: Si empiezas a tener expectativas sobre cómo debería corresponderte o pensamientos de establecerte con ella, es momento de replantear la relación.
7. No saber cuándo retirarse
Finalmente, debes saber cuándo la relación ya llegó a su fin y dejarla ir.
Algunos acuerdos de azúcar tienen fecha de caducidad; incluso lo bueno tiene que terminar en algún momento.
Solución: No te obligues a seguir en una relación que ya no funciona. Si ya no estás feliz, será más difícil salir de ella más adelante.
Esperamos que estos consejos te ayuden a ti, sugar daddy, a navegar el mundo del azúcar con más claridad.
Si tienes algún consejo adicional, compártelo en los comentarios. ¡Seguro que otros sugar daddys lo agradecerán!
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