Hoy en día, hay muchas maneras de encontrar compañía y amor. El sugar dating y las citas tradicionales son dos métodos populares, pero el primero puede no ser del agrado de todos. Las citas tradicionales, como bien sabemos, giran en torno a encontrar pareja a través de la atracción mutua y los valores compartidos.
Mientras que en las citas de azúcar, la naturaleza de la relación está más enfocada a cubrir necesidades de apoyo más general y no solo en el lado emocional. Es decir apoyo de mentoría, económico social o laboral.
Sin embargo, eso no significa que uno sea mejor que el otro; realmente todo depende de ti y de lo que quieras en la vida. En esta publicación del blog, exploraremos las diferencias clave entre sugar dating y las citas tradicionales para ayudarte a descubrir qué opción se adapta mejor a tu vida amorosa.
Motivación
La principal distinción entre las citas de azúcar y otros tipos de relaciones románticas es el motivo de la unión. El objetivo de las citas tradicionales es desarrollar una conexión emocional y encontrar el amor verdadero. El objetivo es encontrar una pareja para toda la vida, alguien con quien puedas pasar tus años dorados, que tenga aspiraciones comparables en la vida.
Por el contrario, las citas con azúcar pueden verse más como una sociedad comercial. Esto es para que la amistad o los favores puedan intercambiarse por asistencia financiera, regalos o otros tipos de necesidades de la sugar baby.
Conocer las diferencias y similitudes entre citas normales y sugar dating puede ayudarte a gestionar tus expectativas. Asegúrate de explorar cómo obtener más vistas de perfil para atraer a la persona adecuada.
La motivación del sugar baby es recibir apoyo y regalos y vivir un estilo de vida lujoso.
Sin embargo, muchos sugar babies y sugar daddies felices han encontrado el amor verdadero y se han casado.
Diferencia de edad
Otra diferencia importante entre los dos tipos de citas es la diferencia de edad entre los socios. En las citas de azúcar, la diferencia de edad suele ser significativa, ya que el sugar daddy o mommy es mucho mayor que su sugar baby.
Esta dinámica puede resultar atractiva para ambos socios:
El sugar baby disfruta de la madurez y los beneficios financieros de una persona establecida, y el sugar daddy o mommy disfrutan de la energía juvenil y el compañerismo de su sugar baby
Aunque esta dinámica también se observa en las citas convencionales, se ve más comúnmente en las citas de azúcar.
Acuerdo
El acuerdo financiero entre el sugar daddy o mommy y el sugar baby es una parte integral de la relación de azúcar. Puede verse como una forma de inversión para ambos.
Los sugar daddies o mommies invierten su dinero, energía y tiempo en el sugar baby, mientras que el sugar baby le devuelve el favor con su compañía, tiempo y cariño
Asignaciones mensuales recurrentes, obsequios extravagantes y vacaciones de lujo son algunas de las muchas formas en que los sugar babies pueden ser compensados por su tiempo. En los entornos tradicionales, el aspecto financiero no existe, pero se espera que ambas partes contribuyan por igual a la relación en todos los aspectos.
Conexión emocional
La conexión emocional es la motivación principal en las relaciones regulares, donde el objetivo es tener una conexión significativa basada en valores e intereses compartidos.
Pero si bien la motivación para sugardating no es necesariamente emocional, este tipo de conexiones existen entre el sugar daddy o mommy y el sugar baby, y el acuerdo (sea el que sea) sigue siendo el pilar de la relación.
Esto se debe a que la pareja sugar date son seres humanos normales y corrientes con sentimientos. Cuando dos personas se conocen y se llevan bien, no se puede negar que se puede formar un vínculo especial entre los socios.
A diferencia de las citas convencionales, las parejas en el sugar dating no pasan tanto tiempo juntas (a menos que se acuerde previamente).
“Se requiere que los sugar bays pasen tiempo con su sugardaddy, pero la cantidad de tiempo se negocia de antemano. La frecuencia oscila entre dos y cinco veces por semana”.
Sin embargo, si el sugardaddy está interesados en pasar más tiempo, se puede arreglar con el consentimiento del sugarbaby y serán bien compensados por su tiempo.
En las citas de azúcar, los roles generalmente se establecen en detalle antes de que comience la relación para que ambos socios sepan qué esperar.
El sugar daddy espera compañía y pasar buenos momentos a cambio de apoyo financiero o regalos, mientras que el sugar baby espera apoyo financiero o regalos a cambio de su tiempo y compañía.
En las citas tradicionales, las expectativas están menos definidas y pueden variar significativamente entre parejas.
Las citas de azúcar suelen ser estigmatizadas en la sociedad en general, y algunas personas las ven como una forma de prostitución.
Este estigma puede dificultar que los “sugars” hablen abiertamente de sus relaciones con amigos y familiares sin sentirse juzgados o avergonzados.
En las citas tradicionales, no existe ningún estigma y las parejas son libres de hablar abiertamente de su relación.
Sal a tu manera, tus reglas
Cualquiera que sea la forma que elijas para tener una cita, solo asegúrate de que sea lo que deseas. Si bien es posible que la vida del azúcar no siga las “reglas” habituales de las citas con las que estamos familiarizados, es posible que descubras que el estilo de vida es más adecuado para ti.
Las citas de azúcar difieren de las citas convencionales en muchos aspectos, pero el aspecto del acuerdo es lo que principalmente las distingue.
Sin embargo, eso no significa que no exista una conexión emocional o real en las citas de azúcar. De hecho, la mayoría de los socios de azúcar terminan formando vínculos profundos entre sí.
Como dijo Octavio Paz, “El amor nace de un flechazo; la amistad del intercambio frecuente y prolongado”. Aunque las relaciones de azúcar comiencen como acuerdos transaccionales, pueden evolucionar a relaciones profundas y significativas.
