Sé lo que estás pensando: que los sugar daddys son algo así como padrotes y que las sugar babies no tienen ni dos dedos de frente para juntar. No te culpo, ese cliché lo hemos escuchado todos. Las relaciones de azúcar han tenido mala fama, pero, ¡aguas! Las cosas están cambiando y ahora más gente entiende lo que realmente es una relación azucarada.
¿Te suena raro? No te apures, vamos a darle una repasada juntos. Aquí te dejo unos cuantos mitos sobre el mundo del sugar dating:
Mito #1: Los sugar daddys son todos unos mujeriegos
Dicen que estos vatos tienen una rotación de 25 chavas al día y avientan billetes como si fueran confeti. Pues sí, hay algunos que son así, no lo vamos a negar. Pero la realidad es que muchos de estos hombres son empresarios que no tienen tiempo para una relación seria y comprometida. ¿Entonces por qué no tener una sugar baby que entienda que la relación es casual? De hecho, es más respetuoso que andar ilusionando a alguien que espera algo más.
Mito #2: Las sugar babies son cabeza hueca
Cuando la banda piensa en una sugar baby, se imagina a una chava sin cerebro, esperando que su sugar daddy la mantenga por siempre. ¡Puro Hollywood! En la vida real, muchas de estas mujeres están bien preparadas, tienen su chamba y simplemente buscan a un sugar daddy que las apapache, sí, pero que también las saque a disfrutar de la vida. ¿Y a quién no le gusta un buen viaje, una buena comida, o una noche de antro?
Mito #3: Todo es cuestión de sexo
Mucha gente cree que ser una sugar baby es como ser una máquina de placer. ¡Pero si fuera tan fácil! Las relaciones azucaradas vienen en todo tipo de arreglos. Algunos sugar daddys solo buscan compañía y punto. Todo depende de lo que acuerden entre ustedes. Y recuerda, no tienes que hacer nada que no quieras.
Mito #4: Las sugar babies deben parecerse a Ken y Barbie
Dicen que para ser una sugar baby, necesitas tener bubis de plástico, labios hinchados, cabello rubio y un trasero de escándalo. ¡Están más perdidos que un burro en la playa! Claro que hay sugar babies que se ven así, pero también hay muchas que no buscan parecerse a una muñeca. Cada quien tiene su estilo y cada sugar daddy tiene su gusto. ¡Pide el bistec en vez de la ensalada si quieres!
Mito #5: Todos los sugar daddys son viejos y casados
“Los sugar daddys son puros señores casados que le ponen el cuerno a sus esposas”. Ajá, como si solo hubiera esos. Sí, algunos están casados, pero también hay viudos, divorciados y solteros. Y ojo, no todos los casados buscan engañar; hay parejas que buscan relaciones abiertas o poliamorosas para darle sabor a su relación. Y no te sorprendas si te topas con un sugar daddy joven y exitoso, que simplemente no tiene tiempo para algo más serio.
Mito #6: Todo se trata de regalos caros y cuentas llenas de lana
Muchos piensan que ser una sugar baby es vivir en jets privados, comprar sin parar y asegurar un futuro dorado. Bueno, hay de todo, pero la neta es que muchas sugar babies buscan algo más práctico. Para algunas, puede ser cuestión de sobrevivir, especialmente en estos tiempos. Para otras, es una forma de conectar con gente interesante y vivir experiencias que de otro modo no podrían.
Mito #7: Las relaciones de azúcar no son reales
Hay quienes dicen que las relaciones de azúcar no son relaciones de verdad. Pero si pasan tiempo juntos, cenan, viajan y se divierten, ¿no es eso una relación? Claro, algunas son más superficiales, pero otras pueden ser bastante íntimas y profundas. Todo depende de cómo lo manejen y qué tanto se dejen llevar por la corriente.
Conclusión
El sugar dating no es para todos, y está bien. Pero para algunos, es una forma diferente y emocionante de conocer gente y expandir sus horizontes. Ahora que ya sabes qué onda con los mitos sobre el sugar dating, ¿por qué no abrirte a esta experiencia y ver qué puede ofrecerte?Como no darle otra oportunidad y ver qué pasa? 😉
